Después de haber experimentado un estado alterado de consciencia me propuse evidenciar lo que en otras palabras resumo como un viaje mental. El apego por un tipo de realidad que, conforme mi estado de consciencia se eleva me comienza a abrir un sinfín de opciones más. Ideas que se sobreponen una tras otra -sinestesia-. 

 

Con el apoyo del microscopio retraté lo que se observa en conciencia, distintas flores con múltiples ampliaciones, haciendo variaciones de intensidad entre luz halógena y luz ultravioleta con diversos filtros. Al observar las imágenes con y/o sin lentes rojo-cyan, arroja la imagen tridimensional y a su vez una de las infinitas perspectivas visuales -o no visuales- que existen; siendo el resultado la proyección de la misma escena a partir de otra realidad. De esta forma, la realidad que entendemos se convierte en algo creado con base a nuestras percepciones. Poniendo en evidencia ese momento donde el límite del universo se desvanece y nos encontramos con esa verdad que queda por fuera de nuestro alcance.